Sobre la poesía, mis poemas y otras cosas 118 (mis comentarios en airesdelibertad.com)

 Un poema con la belleza de lo hondamente sentido y claramente expresado.

Versos que, de tan puros, tintinean.

El embajador español en la corte del francés Luis XIV dijo: "Donde un español no llega con la mano, llega con la punta de su espada". Pues bien, donde no llega con la punta de su espada, puede llegar con la de su pluma.

Un poema que haga sonreír al corazón.

Con la poesía se establece una relación primero de seducción, después de posesión, finalmente de amor.

Todos vivimos una odisea inacabada, lo importante es ser conscientes de ello y disfrutarla (como nos dice Cavafis en su "Viaje a Ítaca").

¡Cuántas veces lamentamos lo que no dijimos!

Más que enseñar cosas deberíamos enseñar a verlas, a amarlas, a conocerlas.

Parece que los poderosos ganan siempre.

Importa más con quién que dónde.

Hay palabras que golpen como puños.

El encanto y la frescura que aún transmite en todas sus películas es inigualable, por eso Marylin Monroe no morirá nunca porque ya ha alcanzado el Olimpo, el Mito.

La poesía es eso: recoger los susurros en la noche y llevarlos a una hoja de papel.

Hace poco tuve oportunidad de contemplar el mar de nubes desde un avión y también volar atravesando el interior de unas nubes de tormenta. Desde arriba, las nubes tienen más consistencia, parecen un colchón en el que uno, si cayera, podría rebotar.

Diógenes de Sínope https://sientopasareltiempo.blogspot.com/2020/11/diogenes-de-sinope-sonetos-griegos.html Nuestro imaginario como poetas se forma en nuestra infancia. Diógenes es un personaje que me llamó la atención desde que me hablaron de él. Cuando en el grupo Metáfora nos pusimos como taller escribir sonetos de tema mitológico, elegí aquellos temas y personajes que para mí tenían más sentido, me procuraban alguna enseñanza. Este es el último de los veinticuatro que escribí en ese taller. Diógenes como pensador y como persona se las traía y como tú dices era fiel a su manera de pensar, lo que ya tiene su mérito. A desparpajo, a Diógenes no le ganaba nadie. El mayor reconocimiento es la fidelidad a uno mismo. Siempre me impresionó como Diógenes no claudicó ante el hombre más poderoso de su tiempo. Sus palabras han atravesado el tiempo. Es la poesía la que elige ser intimista, o divulgativa... según las circunstancias de uno. Exaltación de la sencillez y también de la fidelidad a uno mismo y a sus propias ideas.