CUANDO LAS HOJAS...
Cuando las hojas alfombran los paseos
y en los parterres no hay más flores
que alguna medio muerta en las adelfas,
cuando las copas de los árboles
amarillean y empiezan a enseñar sus ramas
cual muñones desnudos, cuando palomas
y cotorras se reflejan en el cielo
como en un espejo de plata bruñida,
cuando ves a la gente enfundarse el jersey
y cambiar sus sandalias por zapatos...
entonces puedes decir que se acabó el verano.
Pedro Casas Serra (08-10-1992,03)
Antes de llegar al final, ya percibía el olor y color del otoño en este espléndido poema. Me ha gustado esta forma de abrir las puertas a la nueva estación que se aproxima.
ResponderEliminarUn abrazo.
Para los que vivimos en la ciudad, el otoño también tiene sus maneras de anunciarse. Gracias por tu comentario, Fany.
EliminarUn abrazo.