sábado, 31 de diciembre de 2022

Sobre la poesía, mis poemas y otras cosas 272 (mis comentarios en airesdelibertad.com)

Las de Badalona no son las primeras muertes de inmigrantes, pues en agosto pasado murieron tres personas más en la Barceloneta, inmigrantes también, a causa del mal funcionamiento de una estufa. Y recordemos que en Badalona es alcalde García Albiol, del P.P., que ganó por primera vez la alcaldía con un discurso claramente xenófobo (dijo que iba a limpiar la ciudad de rumanos). Aunque es igual, pues ha habido alcaldes de otros partidos entre medio, y los problemas no se han solucionado. "La pobreza mata" he leído, escrito por una mano anónima, en alguna pared, y es verdad. ¿Os habéis fijado que desde que empezó la crisis, en el 2008, cada invierno mueren muchas personas por incendios causados por problemas con la instalación eléctrica o la calefacción?  Porque la instalación está en mal estado: por sobrecargas, porque se ha pinchado la línea de abastecimiento, por mal funcionamiento de los aparatos. Todas estas muertes están causadas por la pobreza, por las condiciones de hacinamiento en que vive mucha gente. Y siempre hay un peor, y entre los que viven mal los que viven peor son los inmigrantes, que carecen de cualquier clase de apoyo social. A los que han escapado de las llamas de este incendio, perdiendo todo lo poco que tenían, les han dado una bolsa con lo imprescindible, una especie de kid de suervivencia, ¡y a vivir! Mientras tanto, los políticos de todos los colores no hacen sino vendernos humo. Hace poco se anunciaba en la prensa de Barcelona que la Corporación Metropolitana de Barcelona construía miles de viviendas y se ilustraba el anuncio con fotografías de las viviendas -¡simuladas!-, hechas por ordenador. Así son las viviendas construidas por los políticos, ¡pura fantasía!. ¡Vergüenza!

Vivir en el recuerdo, revivir.

Creo que nunca se alcanzan los deseos y que solo queda el consuelo de haberlo hecho lo mejor que hemos sabido. Al final, como don Quijote antes de morir, hemos de reconocer que la empresa que nos propusimos era demasiado ardua, que nos venía grande, y pasar el testigo. En ese sentido la poesía es testimonio, es ese testigo.

Hay versos como perlas.

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