Hoy, por las
facilidades de la técnica, se ha banalizado la correspondencia y también
la fotografía. Se escriben mensajes de texto y se hacen fotos con tanta
facilidad y en tal cantidad que después no queda nada de ellos. Es una
lástima.
Con los años, se reviven imágenes del pasado y también
de ocasiones perdidas, de caminos que se han separado. Pero es imposible
saber qué hubiera ocurrido de tomar otras decisiones, solo tenemos la
certeza del camino recorrido.
Cómo orientarnos frente a tanta confusión. Yo creo que hay que elegir al honesto, al recto, al bondadoso, y seguirlo.
Me
atrae más la duda que la fe. Asistiendo a algunas sesiones sobre
filosofía ofrecidas en las bibliotecas de Barcelona, he podido observar
que las preocupaciones de los filósofos actuales se ciñen más a temas
más próximos y concretos, que a grandes preguntas existenciales. Quizá
eso sea más útil, no lo sé.
A veces hay que distanciarse de la realidad y coger aire.
La bruma aleja las realidades y las convierte en su sombra. Entre esa bruma nos movemos muchas veces, tanteando…
Una
explosión de alegría para celebrar el amor como solo se hace junto al
Mediterráneo -fulgente de sentidos: con música, baile y fuegos
artificiales.
En el trayecto entre la exaltación y la humildad estamos, intentando hallar el equilibrio.
Me encanta lo humanos que podían ser los dioses griegos, en cambio el Dios del Antiguo Testamento... déjalo correr.
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